foto fachada panorámica Montmeló

Enamoramiento, flechazo, entusiasmo, amor, ilusión, ternura, cariño, afecto, seducción, pasión, reto, esperanza.

El flechazo fue inmediato. La chispa saltó nada más pisar el jardín. Antes de entrar, solo su cuerpo central poligonal, ya me atrajo. Abrir  y sentir el pasado fue fascinante. Transformar y volver a su origen, un placer.

Vayamos descubriendo.

Conocer su pesado fue lo primero, así que empecé a investigar: internet, organismos oficiales, museo, Generalitat. Alguien tendría alguna información. Nada o poco fue lo que encontré.

Dejé volar la imaginación y fue fácil. En el dormitorio una antigua maleta de cuero con parches, sobre su mesita revistas alemanas de los años 30, en el baño un cepillo de dientes y un mueble pieza antigua de dentista, en el comedor sobre la impresionante mesa de madera maciza labrada un botellín de cerveza, un libro abierto con una gafas de montura de pasta amarillenta.

Can Manich

«No creo que pueda descansar mientras no sepa algo más de este fantástico asunto. Yo ya he visto algo del lado malo de la vida, pero le doy mi palabra de que esta rápida serie de extrañas sorpresas me ha alterado los nervios por completo. No obstante, ya que hemos llegado hasta aquí, me gustaría acompañarle hasta ver resuelto el caso.»n texto subrayado

La idea ya estaba clara. Lo merecía así que como dijo Carlos Rentalo, «Yo no cambio por nadie, mejoro por quien lo merece» y Can Manich, la dama de Montmeló, me haría mejorar o descontrolaría mi vida.

Adelante!!! un open house, un mercadillo con los objetos de la casa, un Sant Jordi de papel, un evento benéfico y solidario  y algo también encantador un mercado de artesanos (jóvenes emprendedores geniales) y además quiero una historia del pasadoun libro de visitas donde me regalen sus recuerdos relacionados con esta misteriosa  dama.

Y eso ocurrió,  hice el prólogo e invité a que me dejaran retazos, los secretos mejor guardados.

Ahora comparto sus palabras porque lo bueno y bello no se debe acaparar.

Escribiendo en el libro de visitas«Soy de Montmeló y esta casa siempre me había llamada la atención y no la había visto nunca por dentro. Hoy he entrado y me ha gustado mucho. Es una casa muy especial y merece ser conservada»

«Hoy he descubierto Can Manich, después de vivir, ahora ya hace mas de 43 años en Montmeló, me encuentro con la historia de una casa y una familia que hará 100 años decidió venir a veranear a Montmeló.
Gracias a aquellos que lo decidieron, hoy disfrutamos de este patrimonio en nuestro pueblo.
Os agradezco que en este momento en que habéis decidido vender vuestro patrimonio y vuestros enseres, parte de estos los destinéis a acción social.
La recaudación de la venta de libros y utensilios (objetos) la destinareis de común acuerdo a Cáritas Parroquial, de esta forma perpetuaremos vuestro recuerdo en nuestro pueblo. Gracias, muchas gracias»

«Me encanta la casa, me encanta la iniciativa que han tenido las personas que la ponen en venta. Muchas gracias Begoña Ballesteros de Barcelona !! por vuestra generosidad y también por la de los propietarios que han hecho de esta venta una verdadera fiesta de solidaridad con Cáritas Parroquial de Montmeló.
De la casa, quería destacar que para Montmeló es un orgullo poderla tener. Deseo que quien la compre la sepa amar
Mucha suerte y muchas gracias»

(Montserrat, la autora de este bello mensaje, es la coordinadora de Cáritas en Montmeló. La primera vez que hablé con el alcalde y su secretaria les conté mi idea y les pedí me sugirieran una asociación local necesitada de fondos. Me contaron que Cáritas alimentaba a muchas familias. Cada vez más familias de Montmeló carecen de lo mínimo para subsistir. Montserrat se volcó inmediatamente. No sé si le gustaría que enumerara todo lo que ha hecho pero sé que he recibido más que lo que he dado. El sábado 8 me ha prometido que volverá a Montmeló.)

«Los recuerdos no hace falta que sean o hayan sido reales para disfrutarlos. En esta casa he veraneado a principios de los 60, en los primeros años de mi vida. Años en los que los olores y los colores se van fijando (grabando) en nuestro cerebro. Recuerdo el nombre de mis amigos y tengo nítidas las travesuras que hice. Veranos de sol y calor (calima) y apertura de los sentidos al mundo. Dentro de la casa mucho ruido, mucho contacto con abuelos, tíos y primos y hermanos. Que más podía desear un niño? Amor, familia,
amigos, espacio para correr y a resguardo de la lluvia
Lo tenia todo, lo tengo todo» de sir Arthur

“Lo que la casa encierra es el secreto mejor guardado.

Ser espectadora silenciosa y discreta de las vivencias de todos los que la habitaron.

Que sus buenas vibraciones se impregnen en los que están por venir para disfrutarla

Lo mejor está por llegar”

“El jardín de la casa evoca tiempos pasados, las personas que pasaron horas soñando imposibles añorando revivir momentos felices con los que ya estarán ausentes para siempre, y como si de un cuento se tratase, aparece el amor inalcanzable, el que nunca se consume porque no llega a consumarse”.

Sant Jordi“Hoy día del Libro y de la rosa, es uno de los más emotivos para mi porque estoy viviendo en nuestra “casita” de Montmeló un evento que me recuerda mucho a mis queridos padres y los muy felices días pasados con ellos. Lo recordaré siempre”

“Espero haber podido colaborar con Cáritas con la compra de un interesante libro sobre la vida de Verdaguer”

“Nos ha encantado la casa, lo que contiene… pero sobretodo nos gustó mucho ¡la organización! Nos ha gustado poder colaborar”

“Felicidades a Begoña por el buen trabajo realizado en esta magnífica casa. Un lugar con muchas posibilidades. Volveremos el día 8 a recoger nuestra compra y pasar un buen rato”

“Gracias por este momento, es una casa magnífica que cualquier persona que pase por delante, sueña con poder entrar y verla”

Dejando un comentario sobre Can Manich“Hace muchos años nos conocemos la casa y yo. Desde mi casa siempre te veo, pero hasta hoy no he tenido el placer de disfrutarla. Gracias. Deseo que quien compre esta casa tenga la capacidad de amarla”

“Ha sido una visita muy interesante, un retroceso en el tiempo, lástima no tener más posibilidades para adquirir todo lo que el corazón quisiera llevarse”

“Siempre sentí curiosidad por esta casa después de pasar tantas veces delante de ella. Ha sido mágico”

«Hoy he descubierto Can Manich, después de vivir, ahora ya hace mas de 43 años en Montmeló, me encuentro con la historia de una casa y una familia que hará 100 años decidió venir a veranear a Montmeló.
Gracias a aquellos que lo decidieron, hoy disfrutamos de este patrimonio en nuestro pueblo.
Os agradezco que en este momento en que habéis decidido vender vuestro patrimonio y vuestros enseres, parte de estos los destinéis a acción social.
La recaudación de la venta de libros y utensilios (objetos) la destinareis de común acuerdo a Cáritas Parroquial, de esta forma perpetuaremos vuestro recuerdo en nuestro pueblo
Gracias, muchas gracias»

Como dijo una de mis más expresivas visitantes «estoy segura que lo mejor aún está por llegar…»

Si vienes el 8 de junio te pediré que me regales tus palabras para el libro de visitas….y te llevarás sorpresas y regalos. Un mercado de jóvenes entusiastas emprendedoras nos ofrecerán sus productos hechos por ellas mismas (bolsos, zaptatos, pañuelos, ganchitos del pelo). sortearemos el reloj antiguo y las entradas de tribuna para el GP de moto en el Circuit de Catalunya. Entregaremos el premio del concurso de dibujo infantil (todavía estás a tiempo)….