Durante todos estos últimos meses, desde el nacimiento de mi blog, hasta el día de hoy ha pasado tanto que parece que el tiempo se haya detenido en la casa modernista de Montmeló (Barcelona).
Tenía ganas de contaros que ha inspirado esta pasión por mi profesión inmobiliaria, el por qué de compartir en el blog lo que hago y lo que siento trabajando en este sector apasionante y a la vez esclavo.
En el baúl de los recuerdos encontré el primer escrito por el que me dieron una pequeña mención del Ministerio de Cultura en el año 1980. Escribí el “Testamento de Quevedo” y lo presenté en unos folios que envejecí con la ayuda de mi “aita”.
La magia de la escritura, la colaboración familiar y el salto al pasado unido a la madurez que me ha proporcionado mi tarea inmobiliaria, la confianza de mis clientes y mi corazón de mamá, han provocado un nuevo reto: el proyecto Can Manich en Montmeló.
¡Cómo pasa el tiempo! ¡Me encanta recordar aquellos momentos! Llegar del cole y hacer los deberes con mi padre, leer juntos sus novelas favoritas «El Quijote» de Cervantes, «Genio y Figura» de Juan Valera y los poemas de Hartzenbusch.
🙂 Todavía lo recuerdo:
«Un pescador, de Bilbao, cogió, yo no sé dónde, un bacalao. -¿Qué vas a hacer conmigo?- le preguntó el pez con voz llorosa. – Te llevaré a mi esposa y ella con pulcritud y ligereza te cortará del cuerpo la cabeza. Negociaré después con un amigo, y si me da por ti maravedises, irás con él a recorrer países. -¿Sin cabeza? ¡Ay de mí! -gritó el pescado. Y replicó el discreto vascongado: -¿Por esa pequeñez te desazonas? Pues hoy viajan por el mundo así muchas personas.»
¡Qué buenos recuerdos! Gracias, “aitite” (ya es abuelo)!
Pero ahora estamos aquí. Se acerca la fecha de mi “proyecto”
Acompañadme, por un instante, cerrad los ojos, mentalmente miramos por la cerradura de Can Manich y demos un salto al pasado. Imaginaros a “la Dama” cien años atrás. Ese salto al pasado es el que me ha “movido” a vivir su nueva historia y contarla para encontrar el comprador que sepa resucitarla. Ojalá este blog llegue a sus oídos/ojos y entienda y continúe lo que comenzó aquel año de 1915.
La “Dama” debe estar presentable para acoger a quien quiera conocerla así que, en esta casa me he remangado, trasteado, colgado cortinas, he hecho camas, limpiado espejos…y no me importa. Una operación más en la que estoy disfrutando. Los que vengáis el 18, 19 de mayo y 8 de Junio viviréis una experiencia inolvidable
Con todas las mariposas en mi estómago, a pocos días de evento #canMontmelo ya estamos en todas las redes sociales. ¿ nos habrá visto el comprador de esta Dama? Ya tenemos confeccionado el inventario con los precios de salida
Quiero agradecer a los que estuvieron en el primer evento y los que lo hicieron en la distancia. La generosidad de los compañeros, una bonita sorpresa para Cáritas Montmeló
Hoy la “Dama/casa” está pintada, limpia y vestida con sus mejores galas…colchas de los años 20, cortinajes, mantelería… Estoy deseando que lleguen esos días
Os veré en Montmeló? 🙂 Hay muchos motivos…. la casa lo merece, Cáritas se beneficia de las ventas, puedes encontrar a compañeros y a otras personas interesantes, hay objetos antiguos a precio de venta simbólico… Hasta puedes tener tu propio motivo. ¿te veo en Cervantes 5?
[…] lo mucho que me gusta imaginarlo. Tengo la teoría de que ha vuelto a la vida. Que algunos de sus muebles permanecerán aquí. El enorme espejo del recibidor bautizado por Iulen como el espejo de Harry […]