¿Cómo pude imaginar que las rrss olvidarían mi cumpleaños? 😉
Sin tregua cada 10 de julio me agobio ¡Desde siempre!  Desde que era esa tímida que odiaba serlo, desde que era la pequeña que se metía en peleas que no eran suyas (pero sí le importaban), desde que me apasionaba correr y saltar obstáculos (aunque mi amatxu me dijera que «una señorita no corre»), desde que era esa soñadora que encontraba soluciones reales (fan de Mac Gyver) y viajaba en alfombras mágicas, imaginaba un mar de tesoros (todo era un tesoro), que veía un elefante tragado por una boa (el principito). Desde que disfrutaba compartiendo aventuras de jinetes y piratas (no recuerdo nada de príncipes y princesas), desde que…desde siempre.

…y el viaje de la vida ha seguido, desde ese mundo infantil en el que lo peor que podía pasar es que  explotara un globo en la cara, se rompiera la sandalia o perdiera el ticket del bus… hasta otros 10 de julio no tan ​buenos.
En mi recuerdo está uno horrible, el secuestro de Miguel Angel Blanco y un pensamiento en mi cabeza «no, no, por favor, esto tiene que acabar»​ y una enorme sensación de impotencia.​

La última vez que estuvimos en Londres nos contaron que un 10 de julio ardió Londres y recuerdo que mi marido me miró y me dijo «averiguaremos que cosas buenas ocurrieron un 10 de julio». Le miré y le dije «nací yo» y se rió. Se rió mientras me abrazaba….y el tiempo ha pasado…y ha llegado otro 10 de julio.

Releyendo todo eso que era, que hacía y que me importaba… el presente es el resultado, es lo que soy… elegí una profesión con piedras en el camino, soy profesional inmobiliaria, resuelvo problemas, pido para otros, soluciono problemas reales, escucho, salto obstáculos, lamento tener que decir «no estás preparado para trabajar conmigo», me enfrento a mi orgullo,…entro en vidas ajenas para decirles no vendas, espera, aprovecha esa oportunidad, vamos a ver como lo gestionamos, no me llames para chanchullos, tengo buenas noticias, hoy te voy a dar tu regalo de navidad aunque estemos en pleno verano, encantada de ayudarte…Y todo sin picar puertas, sin llamadas frías, sin ir nunca donde no me esperan. Estoy orgullosa de hacer mi trabajo con dignidad y respeto.
Es el día del balance, del Gracias y de pedir un deseo.

Gracias
por acompañarme en las tempestades y en las calmas. Gracias porque nunca nunca imaginé estar tan bien acompañada. Gracias por salir a defenderme cuando os he necesitado. Gracias por reir juntos. Gracias por dedicarme un rato. Gracias por ser vuestro vampiro. G R A C I A S por ese abrazo ​que rompe todos los miedos. #Gracias!!

…y como hoy es el primer día del resto de mis días me voy a dibujar una sonrisa y con los dedos cruzados 😉 voy a pedir un deseo doble «que pase de moda odiar y se ponga de moda donar »